Así que, aprovechando los fríos, sopita al canto. Que luego se adelanta la primavera y ya no hago platos calientes de cuchara porque, aunque me gustan mucho, enseguida son sustituidos por ensaladas y platos fríos, aquéllos a los que el cuchareo desplaza a codazos en cuanto asoma el mal tiempo. Y es que, aunque no deje de cocinar ninguno de ellos durante todo el año, reconozco que para mí son muy estacionales y fuera de su tiempo, apenas los preparo, sobre todos los de cuchara.
La sopa que os muestro es sustanciosa, muy reconfortante y como diría aquél “con fundamento”. Para hacerla, elegid una patata que no sea muy harinosa y que se mantenga entera al cocer, algo en lo que no os puedo aconsejar porque no entiendo nada de patatas, el que sabe es mi pareja, al que le pido que siembre en la huerta una que valga para frita y para cocida y aunque suele decirme cuál ha plantado, nunca consigo memorizarlo como tampoco aprendo qué variedad es apropiada para cada uso, es como una especie de bloqueo mental, Aunque si os gusta una patata que suelte el almidón y engorde el caldo, adelante, pues sólo variará la textura sin afectar al sabor. Hablando de texturas, tanto la patata como la manzana tienen que quedar enteras, con cuerpo, nada de blandurrias, por lo que esta sopa no es muy adecuada para el recalentamiento ya que los ingredientes se seguirán cocinando y poniéndose blandos y la patata la espesará.
¿Manzana en una sopa?. Pues sí y queda bien buena, por cierto. Además su textura ligeramente esponjosa combina perfectamente con la mantecosa de la patata y su sabor un poquito ácido casa muy bien con el dulcecito del puerro.
Disfrutadla muy caliente y con bien de perejil por encima, que no sólo le aporta color, sino también frescura y textura crocante.
Venga, manos limpias, cuchillo afilado y a cocinar.
125 gr. de puerro, de la parte blanca
100 gr. de patata, pelada
75 gr. de manzana granny smith, pelada y descorazonada
25 gr. de mantequilla con sal
15 ml. de AOVE
400 ml. de agua
la punta (generosa) de un cuchillo romo de pimienta negra molida
sal
perejil fresco (para servir)
ELABORACIÓN:
Cortar el puerro a lo largo en cuatro partes y luego cada una en rodajas de un centímetro de ancho, aproximadamente. Reservar.
Picar la patata en dados de un centímetro de lado. Proceder de igual modo con la manzana. Reservar ambos ingredientes por separado.
Lavar el perejil, cortar las hojas groseramente y reservar.
Poner en un cazo la mantequilla y el aceite de oliva virgen extra. Calentar a fuego medio y cuando se deshaga la mantequilla, añadir la manzana y rehogar justo hasta que empiece a ablandarse, de minuto y medio a dos minutos. Escurrir y apartar a un plato.
Introducir el puerro en el cazo y cocinar a fuego medio hasta que empiece a dorarse. Añadir entonces las patatas, rehogar dos minutos e incorporar el agua, la pimienta negra y sal al gusto. Levantar el hervor y cocer a fuego suave hasta que la patata esté cocida pero con cuerpo, unos 8-10 minutos. Devolver al cazo la manzana junto con los jugos que hubiera soltado, hervir un minuto, apartar del fuego, tapar y dejar reposar 3 minutos.
Rectificar de sal, si procede y servir espolvoreada con perejil en cantidad al gusto.
A comer.