miércoles, 30 de octubre de 2019

Pan para tostadas, en panificadora Lidl


Desde que el otro día cambiaron la hora, estoy que no me entero. Odio este horario de invierno, tardo más de un mes en acostumbrarme a él y no le veo la ventaja por ninguna parte, por mucho que nos quieran vender el supuesto ahorro energético que conlleva. ¿No habían dicho que lo iban a suprimir? Espero que así sea y que no tarden mucho.

Y mientras espero que ese día llegue, empiezo el mío desayunando unas tostadas con mermelada casera y este pan tan rico. La receta está adaptada de ésta del blog Pane e Pizza, que aunque ya no está activo, sigue ofreciéndonos sus recetas en la red. Su autora lo llama pan para sandwich y aunque se puede utilizar perfectamente para ese fin, lo veo tal vez un poco denso, aunque bien es cierto que por eso mismo aguanta muy bien el peso de los ingredientes con lo que resulta muy recomendable para esos bocadillos con mucho relleno que yo sólo me veo capaz de comer con cuchillo y tenedor.

Decía que el pan es denso, pero también es verdad que es muy suave y se come muy bien. Tiene un sabor muy parecido a algunos panes de molde comerciales y personalmente lo encuentro más rico que éstos. Es de esos panes que yo llamo “bizcopan”, porque están a medio camino entre un pan y un bizcocho. Y creo que es un masa que se podría elaborar a mano de principio a fin, porque una vez amasada es muy consistente; bien es cierto que no sé hacer pan a mano, así que tal vez me equivoque.

Para que la corteza quede más tierna, meted el pan aún caliente dentro de una bolsa de plástico. La condensación producida por la temperatura del pan ablandará la corteza.

Venga, a lavarse las manos y a cocinar.



INGREDIENTES:

200 gr. de agua templada

140 gr. de leche desnatada templada

105 gr. de aceite de girasol

40 gr. de azúcar blanquilla

7 gr. de miel

20 gr. de sal

335 gr. de harina de repostería

335 gr. de harina de fuerza

11 gr. de levadura de panadería fresca a temperatura ambiente



ELABORACIÓN:

Sacar la cubeta de la panificadora.

Introducir todos los ingredientes en la cubeta en el orden que se indican. Desmenuzar con los dedos la levadura antes de incorporarla.

Colocar la cubeta en el interior de la panificadora. Cerrar la tapa y conectar el aparato. Seleccionar el programa 1 (normal), peso 1.000 gr. y tueste bajo.

Cuando la máquina emita los tonos de aviso en la segunda fermentación, sacar la cubeta y con las manos húmedas quitar las palas amasadoras e introducir éstas inmediatamente en un bol con agua que las cubra para facilitar su posterior limpieza.

Con las manos húmedas, acomodar la masa (es una masa dura) para evitar las burbujas de aire que se puedan haber introducido en la misma al quitar las palas. Colocar nuevamente la cubeta en la panificadora y continuar con el programa.

Una vez finalizado el programa, dejar que el pan repose en caliente dentro de la máquina 15 minutos. Desmoldar y dejar enfriar encima de una rejilla.

Se conserva tierno durante varios días dentro de una bolsa de plástico.

A comer.



6 comentarios:

  1. Tú si que sabes conllevar el cambio horario, a la hora que acompañes este pan con lo que sea, está rico y será un momento de disfrute. Yo no he elaborado nunca panes, pero cuando me pones por delante uno bien rico como éste, soy capaz de comérmelo entero.
    Un beso.

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    1. Yo no sé hacer pan a mano y eso que tengo unas ganas tremendas de aprender a amasar, pero para eso hace falta organización y no encuentro el momento de ponerme a ello. De momento en mi casa el pan lo hace la maquinita que, aunque seguro que no se puede comparar con uno hecho a mano, también elabora panes espectaculares como éste, que es de los mejores que he hecho.
      Gracias Lola por tu comentario.
      Un beso.

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  2. Isabel, ayer no vi ningún blog porque ando liada con mis recetas, que me ocupan demasiado tiempo, pero es que yo soy así.
    A mí me pasa lo mismo. Este horario lo llevo fatal. El otro día, empecé a hacer la comida a las 12, pensando que era la 1 y hay días que me cuesta hasta levantarme. Me parece que la edad no perdona y lo llevo peor que nunca.
    No esta nada mal el pan, teniendo en cuenta que no tienes costumbre de hacerlo a mano. Con la mermelada y con aceite o a mordiscos, seguro que está muy rico.
    Como lleva leche, seguro que le aporta la densidad que comentas.
    Me llevo mi trocito para merendar.
    Besos.

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    1. Hola Marisa. Te entiendo perfectamente; cuando empecé en esto no imaginaba la cantidad de tiempo que lleva y a medida que una se va perfeccionando, seguro que más aún. Es uno de los motivos por lo que no estoy en ninguna red social, porque no tengo tiempo para atenderlas y tampoco quiero que se conviertan en una obligación, ante todo el blog tiene que ser algo con lo que disfrutemos, no algo que nos estrese.
      A mi este horario me trastoca por la tarde-noche, con eso de que no haya apenas luz me da por pensar en preparar la cena a las 7 como que son estas horas y ni pensado tengo en qué cocinar.
      El pan quedó muy rico y aguanta muy bien el paso de los días, aunque ha durado poco. En este momento tengo otro haciéndose en la panificadora, así que mañana, pan reciente para desayunar.
      Un beso.

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  3. Hola, me ha encantado. seguro que dur muy poco pues rebanada a rebanada se le da fin enseguida. Un beso!!

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    1. No duró nada y eso que pesaba un kilo, pero estaba tan bueno que voló; no tiene nada que envidiar a muchos panes de molde comerciales.
      Un beso.

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