miércoles, 25 de marzo de 2020

Magdalenas de flan de sobre


Días grises, casi otoñales; la primavera ha llegado pero parece triste, como el país. Y como siempre se ha dicho que las penas con pan son menos, pues un pan no traigo, pero sí unas magdalenas para alegrarnos un poquito ese solitario café de las tardes o el aún más solitario de media mañana para aquéllos acostumbrados a la pausa laboral del café, a ese rato de distensión con los compañeros, en los que se habla de lo divino y de lo humano y normalmente arreglamos el país.

Unas magdalenas super esponjosas, las más esponjosas que he hecho nunca. Y que dicho sea de paso, le he “robado” cariñosamente a Lola de Con sabor a huerto. 

Por cierto, que ella dice en su entrada que les notó un gustillo raro y pienso que pudo ser por el impulsor porque yo lo he cambiado por una papeleta de gaseosas (de esas dobles que tienen un sobre de cada color) y no le he encontrado ningún gustillo. La única pega que les pongo en que para nosotros han resultado muy poco dulces, pero es porque claramente somos muy golosos.

Venga, a lavarse las manos y a cocinar.


INGREDIENTES:


* Todos los ingredientes a temperatura ambiente


3 huevos tamaño L


150 gr. de harina de todo uso


100 gr. de azúcar blanquilla


100 ml. de leche desnatada


1 sobre de preparado para flan


125 ml. de aceite de girasol


1 papeleta doble de gaseosas



ELABORACION:


Precalentar el horno a 190º C con calor arriba y abajo.


Disponer en un bol los huevos, el azúcar, el aceite y la leche y batir con la batidora de brazo.


Aparte y en otro bol, tamizar juntos la harina, el preparado para flan y la papeleta doble de gaseosas. Incorporar esta mezcla en dos veces al bol de los huevos, batiendo con la batidora de brazo hasta integrar todos los ingredientes.


Preparar un molde para magdalenas de doce cavidades, colocando en cada una de ellas un cestillo de papel. Distribuir la masa entre los doce cestillos, golpear delicadamente el molde contra la encimera para que suban las burbujas que pudiera tener la masa e introducir en el horno, colocando la rejilla en la tercera posición empezando por abajo. Poner el termostato a 180º C y dejar sólo el calor por abajo.


Hornear 20-22 minutos, comprobando el punto de cocción pinchando con una brocheta una de las magdalenas situadas en el centro. Si sale seca, ya se pueden sacar, si no, continuar el horneado, volviendo a comprobar a los dos minutos.


Sacar el molde del horno. Colocar sobre una rejilla y pasados cinco minutos, sacar las magdalenas, colocándolas igualmente sobre una rejilla hasta que se enfríen completamente.


A comer.

12 comentarios:

  1. Que sorpresa Isabel me has dado con las magdalenas, yo ando todavía indagando sobre el misterio del sabor áspero, el impulsor o levadura que utilicé fue la de Royal que es la que siempre uso, creo que va más relacionado con los polvos del flan, por alguna razón a mi me producen esa sensación. Pero me alegro que a ti te hayan gustado, mi marido también me dice que todo lo hago poco dulce y es cierto que las cosas muy dulzonas no me van, aunque eso tiene solución. Te han quedado preciosas, el copete les ha salido redondito, la mar de mono. Espero que acompañen tus mañanas y tardes con mucho gusto, ya que ahora nuestra vida es bastante rara, sin embargo todo pasará, no hay mal que cien años dure. Pues eso.
    Un beso. Cuidaros mucho.

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    1. Pues lo del sabor todavía no se a qué se debe, la verdad. Yo también creía que podía ser por el preparado para flan pero utilicé el mismo que tú y como digo, no se lo noté.
      En cuanto al copete, son las las magdalenas con más copete que he hecho en mi vida. Además quedaron muy redonditas, preciosas, casi daba pena comerlas. Pero nos las comimos y en bien poco tiempo, vamos, que no le pusimos muchos reparos al tema del azúcar.
      Espero que sigáis todos bien. Un beso.

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  2. Una receta ideal para entretenernos en estos días, se ven esponjosas y seguro que alegran cualquier café. Bss guapa y feliz confinamiento!

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    1. Entretienen poco, pues tienen la ventaja de que son muy rápidas de hacer, pero sí alegran el café, tanto que volaron.
      Espero que estés bien. Un beso.

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  3. Hola Isabel! no conocía tu espacio y estoy aquí gracias al clic, clic.por los blogs, que hacemos en estos días metiéndonos en aquello que nos gusta.Si las has encontrado poco dulces, te sugiero, que cargeues una manga pastelera con cualquier dulce que tengas (yo dulce de leche) y le inyectes en crudo un poquito. Luego las cocinas.
    Besos Isabel desde Argentina

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    1. Hola Norma, bienvenida a mi cocina. Ya mismo me apunto tu sugerencia, bien para hacerlo cuando vuelva a hornear estas magdalenas o con otra receta que haga, me parece muy buena idea.
      Gracias por dejar tu comentario desde tu Argentina, tan lejos en kilómetros pero tan cerca gracias a la red.
      Un beso.

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  4. Hola Isabel. Ya me vale, que hace tiempo que no vengo, pero no es por aquí, no he comentado en ningún blog. Llevo desde hoy hace 15 días confinada por ser de riesgo y la verdad, no me apetecía comentar, he ido adaptándome a mi soledad, que es absoluta, porque por suerte, haber pasado por malos momentos, a mí al menos, me ha fortalecido.
    Yo pongo el pan, no te preocupes, que si miras las estadísticas de mi blog, todo lo que está viendo la gente es pan y no precisamente los que elijo y les recopilo yo. A saber...
    Lola es un encanto que hace poco que conozco, tal vez, casi como a ti, pero ambas, estáis entre mis amigas virtuales, compañeras de blog, las que aprecio.
    No había visto magdalenas con preparado de flan, pero sí con el de natillas. Te han quedado para quitarte una ya.
    Cuidaos y cuidad. Yo agradezco cada día y evito enterarme de demasiadas cosas no poniendo casi nada de las noticias, pero agradecer, siempre.
    Aquí está haciendo un tiempo raro, mucho viento, lluvia y frío para la época del año, pero lo prefiero a que haga calor, que en estos lares, es ya casi normal. Lo del viento, casi todos los día, es bastante pesado de aguantar, pero hay que aceptar todo y más en los momentos que nos está tocando vivir.
    Buenas noches y un beso enorme.

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    1. Hola Marisa. Ya leí que querías tomar un poco de distancia, pero ya se te echaba de menos, pues tus cariñosos comentarios siempre me alegran. ¿Sabes? Cuando empecé esta aventura nunca pensé que fuera a recibir cariño de las que os pasáis por aquí, comentarios amables sí, pero no más y ver que me equivoqué me hace sentir grata y felizmente sorprendida.
      No te desanimes Marisa. Si tu historial médico no ha podido contigo, tampoco lo va a hacer esta enfermedad; es algo que en mi caso le digo a todo el que quiere oírlo, porque estoy íntimamente convencida de ello. El futuro a lo peor me lleva la contraria, pero me niego a ser derrotista, porque como a ti, los malos momentos me han fortalecido. Siempre hay que mirar al futuro, sea corto o sea largo, con valentía y ¿por qué no? con descaro. Somos mujeres fuertes, no lo olvides.
      Por aquí llevamos un par de días con mucho sol pero también frío y ha vuelto a helar por las noches, débilmente, pero como los frutales vienen muy adelantados, esas heladas pueden hacerles mucho daño. Otro año que me toca sufrir por mis pobres árboles.
      Espero que todos, en tu familia, estéis bien. Cuídate mucho.
      Besos y feliz fin de semana.

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  5. Bueno!!! cómo te han quedado esas magdalenas! Se meten por los ojos. Nunca las he hecho con sobres de flan, debería probar visto lo visto. Gracias. Un beso.

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    1. Si te soy sincera, no pensaba publicarlas, pero quedaron tan bonitas que era una pena no enseñarlas.
      Un beso.

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  6. Hola, ya vi estas magdalenas a Lola y me encantaron, a tí te han quedado también espectaculares con ese copete tan alto . un beso preciosa y cuídate.

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    1. En cuanto se la vi a Lola me quedé encandilada con ellas, tan altas y bonitas y como nunca me salen con copete, decidí probarlas. Como le digo a Alicia, no pensaba publicarlas, peo quedaron tan bonitas...
      Un beso y feliz semana.

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