La receta que os traigo es, como dicen hoy en día, facilona no, lo siguiente. Y si conseguís “engañar” a alguien para que os ayude a pelar y desvenar cangrejos, ya, ni os cuento. Y es que lo más tedioso de este paté es el asunto de la peladura, bueno, del desvenado también, que aunque ambas tareas son fáciles, llevan su tiempo y más si los cangrejos, como ha sido en mi caso, son pequeños: necesité 640 gr. de cangrejo de río cocido para obtener los 125 gr. de colas que utilicé para la receta. No os harán falta tantos si los compráis cocidos en la pescadería, pues suelen ser de tamaño medio o grandes. Los míos eran salvajes y vivos y me los habían regalado. La verdad que lo agradecí un montón porque como
os comentaba hace poco, hacía años que no los comía, pero casi todos eran muy pequeñitos y aunque los hemos comido de varias formas distintas, nos hemos pegado una “jartá” a pelar bichos y chupar cabezas, lo cual es muy entretenido y si lo miráis bien, hasta bueno para la línea, porque como con el marisco, chupar-chupar, mucho, pero comer-comer, poco, aunque tanto los unos como el otro están taaaannn buenos, que no importa el mucho tiempo y la poca chicha. ¿O sí?.
Os recomiendo encarecidamente que hagáis este paté, pues está tremendamente rico. La textura no es untuosa como la de los patés de carne, pues no tiene el elemento graso que se la proporciona. Pero no es seco, se unta bien y de forma uniforme y tiene la textura de un paté de pescado.
Para hacer esta receta utilicé dos yemas de huevo cocidas que me habían sobrado de otra receta y como ya podéis imaginar, esta es mi aportación del mes de agosto al proyecto 1+/-100, desperdicio 0
que Marisa, desde Thermofan, promueve mensualmente para la reducción del desperdicio en la cocina y el aprovechamiento y reutilización en general, tanto de alimentos como de utensilios, un proyecto muy interesante que si no conocéis os animo a que lo hagáis pinchando en el logo.
Venga, manos limpias, cuchillo afilado y a cocinar.
INGREDIENTES:
125 gr. de colas cocidas de cangrejos de río (peso en limpio, sin cáscaras y desvenados)
60 gr. de conserva de atún al natural (peso escurrido)
2 yemas de huevo talla L, cocidas
1'5 tsp de leche desnatada
3/4 tsp de salsa worcestershire (salsa inglesa)
1/2 tsp de brandy
sal
ELABORACIÓN:
Disponer en el vaso de la batidora de brazo las colas cocidas de las cangrejos picadas, ,el atún escurrido y desmenuzado, las yemas de huevo picadas, la leche, la salsa worcestershire, el brandy y sal al gusto. Triturar con la batidora a máxima potencia hasta conseguir una pasta fina y homogénea.
Introducir en un recipiente procurando que no queden bolsas de aire, tapar, llevar al frigorÍfico y dejar reposar 24 horas antes de consumir para que gane en sabor.
Consumir fresco untado en pan tostado.
A comer.
Isabel, leí la receta pero he estado en otras cosas. Por fin llego.
ResponderEliminarYa te dije creo, que sólo he comido cangrejo de río una vez porque lo vendían en una pescadería. De eso hace tiempo y no los he vuelto a ver
Has trabajado mucho para conseguir limpiarlos y el resultado vale la pena.
Me gusta mucho hacer patés caseros y éste tiene que estar delicioso.
Nunca he añadido huevo y tu idea viene bien para cuando nos quede huevo duro.
Pongo el pan y disfrutamos del sabor.
Mil gracias por traerlo a 1+/-100. Agosto es un mes de cierre y me agradezco mucho más vuestra participación
Un beso grande
Hola Marisa. La verdad que cuando se podían vender vivos los tenían en muchas pescaderías, pero ahora que sólo se pueden vender cocidos, apenas los hay en ninguna. La verdad que cocidos no dan mucho juego en la cocina, salvo para patés como éste o la receta en la que los hice con especias cajún, por ejemplo y poco más.
EliminarDio trabajo limpiarlos porque eran pequeños, per quedó tan rico que no importó.
Al no llevar ningún elemento graso que forme la pasta de los ingredientes, hay que utilizar puré de patata o yema cocida.
Es un placer, como siempre, participar en 1+/-100.
Un beso.
Isabel, lo de "engañar" a alguien me parece una buena estrategia jajaja Yo tengo un problema con este tipo de patés, y es que me gustan demasiado, así que no paro de comer mientras que lo tengo por delante. Desde luego has aprovechado los cangrejos que te han regalado estupendamente
ResponderEliminarAbrazos!
Bueno Javier, para eso se hace, para comerlo, ¿o no? Y si dura poco, no pasa nada, esa es la mejor excusa para los cocinillas como nosotros, que como se acaba pronto, tenemos que hacer enseguida otra receta nueva, jejeje.
EliminarUn abrazo.